jueves, 29 de marzo de 2007

Un cuento escrito por mi.

¡Espero que les guste! Este cuento lo escribí hace 3 años, no es gran cosa, pero espero que les guste:

Lilén, mis padres, el Tuta y yo íbamos al campo.
-¿Estás seguro de que me va a gustar el lugar? - Pregunté estando en el auto.
-Te va a encantar, Juan - Dijo papá.
Cuando llegamos comprobé que tenía razón, era un lugar paradisíaco; el pasto verdo, suavecito..., la arena fina junto a río cristalino... todo era hermoso.
-Lugar perfecto para un picnic - Dijo mamá.
Todos estuvimos de acuerdo con la idea y, luego de comernos unos sándwichs, nos tiramos al río. Pero como el Tuta vio que se avecinaban nubes de tormenta nos subimos al viejo renault 12* de mi abuelo y emprendimos la retirada. Aunque lo hicimos demaciado tarde, ya que en pocos minutos se largó un tormentón increíble.
-¡¡¡Como no arreglé el parabrisas**!!! - se lamentó mi padre enfurecido.
Empezó a caer piedra*** y decidimos bajarnos del auto, conducir en estas condiciones era peligroso.
Corríamos a refugiarnos bajo un árbol cuando caí a un pozo sobre un monton de lodo fangoso que me frenó. Estaba muy asustado y me sorprendió no escuchar gritos de arriba.
-Con tanta lluvia quizás no se hayan dado cuenta - Pensé.
Tanteé a mi alrededor, Pero en vez de encontrar tierra húmeda, llena de insectos, palpé una superficie fría, lisa.
La apertura metálica se abrió y entonces vi que era una puerta gracias a una crepitante hoguera que ardía detras de ella y que, con un fulgor rojizo, alumbraba una sala de piedra.
Entré para secarme, pero me percaté de que la fogata no irradiaba calor, tampoco humo, solo luz; de pronto me dí cuenta cuenta de la presencia de unas extrañas figuras de piedra. Miré fijamente a una de ellas ¿Se había movido? ¿O era solamente un efecto de la luz? Sí, se había movido, y no sólo eso sino que ahora corría a toda velocidad hacia donde yo me encontraba.
Intenté esquivarlo, pero el horrible ser me hizo un profundo tajo en la mano.
De repente la sala empezó a derrumbarse; me golpeé contra un escombro y perdí el conocimiento.
Desperté en el hospital mientras mamá me acariciaba el cabello.
-Má ¿Qué sucedió? La habitación de piedra, la hoguera y la... - dije atropelladamente.
-Fue todo un sueño - Me interrumpió mi madre - Caíste a un pozo sobre una piedra y te desmayaste. Lilén llamó por el celular a los bomberos que te sacaron y te llevaron a la sala de urgencias.
-Fue tan solo una pesadilla - Suspiré aliviado.
Pero esa tranquilidad no duró mucho tiempo ya que levanté mi mano y vi... la cicatriz.

*renault 12: Automovil de la fabrica renault.
**parabrisas: La exprecion correcta hubiera sido limpiaparabrisas, pero no me atreví a corregirlo.
***caer piedra: granizo.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

es buen cuento, la historia es interesante, anuque te falta un poco pulir tu estilo, me gusto.

y porfavor cambia ese estilo psicótico de los colres, arden los ojos.

Nasst! dijo...

muchas gracias! pero dejame pensar un poco lo de los colores...
jejeje